En 2004, el Atlético Celaya que militaba en la entonces Primera A, intentó fichar a Maribel Domínguez, una de las mejores futbolistas mexicanas de la historia; sin embargo, la Federación Mexicana de Futbol impidió que una mujer jugara en un equipo masculino.
En fechas recientes, la holandesa Ellen Fokkema, de 19 años, mediocampista que milita en el VV Foarút, fue autorizada para jugar en un equipo varonil en la Cuarta División profesional.
Semanas después, la internacional japonesa, Yuki Nagasato, campeona del mundo con su selección y medallista olímpica, anunció que jugaría en el equipo masculino Hayabusa Eleven, para impulsar la existencia de conjuntos mixtos en su país.
Lorenza García pone el tema sobre la mesa: ¿pueden las mujeres formar parte de un equipo varonil?, ¿corren algún riesgo?, ¿será aceptado el futbol mixto a nivel profesional?