Timo Werner desbordó al Newcastle, provocó el 1-0, marcó el 2-0 y lideró el quinto triunfo consecutivo del Chelsea de Thomas Tuchel, el cuarto seguido en la Premier League, que coloca a los Blues en la cuarta posición.
Se esperaba este lunes un triunfo del Chelsea, su quinto consecutivo en todas las competencias. Tuchel debutó con el Chelsea ante Wolverhampton con un empate, luego venció a Burnley, Tottenham y Sheffield y Barnsley en la FA Cup.
Chelsea está ahora entre los cuatro primeros de la tabla, de forma cómoda e irrebatible, porque propuso más, creó más, creyó más y fue -y es- mejor que su rival de este lunes, con otro choque imbatido -sólo ha encajado un gol desde el cambio de entrenador- y con la aportación definitiva del atacante alemán.
Hoy Timo Werner es más asistente que goleador -enlazaba 14 jornadas sin batir la portería contraria hasta este lunes- en el Chelsea, pero con una cantidad de recursos para ser lo primero o lo segundo en cualquier instante que ponen en alerta a cualquier oponente, más allá de que su eficacia rematadora sea menor de la que asombró en el Leipzig, quizá también porque la exigencia es mayor.
No acertó primero en el regalo de cabeza que le entregó Marcos Alonso ni después en otro remate por encima del larguero, pero tampoco decae Werner, insistente hasta que consiguió lo que nadie había logrado antes, allá por la media hora del duelo, cuando regresó al césped de un golpe en el labio y con total determinación.
ACIERTO
Werner yomó la pelota, la condujo con una velocidad imparable, exhibió su cambio de ritmo, desbordó hasta la línea de fondo por la banda izquierda del ataque y provocó el 1-0 con su centro, el despeje del portero y el oportunismo de Olivier Giroud, en el sitio justo y en el momento justo para aprovechar tal desorden con un zurdazo.
El partido era suyo. Del Chelsea, incesante por las bandas, sobre todo por el lado derecho con Hudson-Odoi, y dirigido en el medio por Mateo Kovacic, y de Werner, que aprovechó el enésimo córner, también la enésima concesión del Newcastle, para empujar el 2-0 desde el suelo a un metro de la portería y reafirmar a toda velocidad -en 39 minutos- el incontestable ‘efecto’ Tuchel en el Chelsea, para su cuarto triunfo en la Premier.
En la portería, Tuchel eligió a Kepa Arrizabalaga en la titularidad. Fue su segundo partido seguido de inicio tras el 1-0 al Burnley en la FA Cup… Y el primero en la ‘Premier’ desde octubre, cuando perdió el puesto con la evidencia que describieron las 18 jornadas posteriores sin ningún minuto. Sin exceso de inquietud, dejó una magnífica parada a Willock ya con 2-0. El paraguayo Miguel Almirón también tuvo su ocasión, pero su volea fue fallida.
Tuchel ya cuenta más en el Chelsea con Kepa de lo que lo hizo Frank Lampard en los últimos tiempos, y o respaldan sus cinco triunfos consecutivos. Mientras, asoman los octavos de final de la Champions y el Atlético de Madrid, en los que está en duda la presencia de Tammy Abraham, lesionado en el tobillo derecho en el minuto 14 y reemplazado tres después por Olivier Giroud.
EFE