El Barcelona regaló el primer tiempo del Clásico y eso fue suficiente para que el Real Madrid marcara los dos goles que le dieron el triunfo 2-1 y el liderato provisional de LaLiga, a la espera de que el Atlético de Madrid juegue el doimingo.
El Real Madrid ahora tiene 66 puntos, los mismos que los colchoneros, por 63 del Barcelona, que dejó ir una oportunidad inmejorable de ser líder provisional.
DOMINIO
El Real Madrid fue el dueño del primer tiempo en una cancha inundada por la lluvia y sacó una ventaja de dos goles al aprovechar el punto más débil del Barcelona que son las coberturas en las bandas.
Fue por ahí que se originó la jugada del 1-0, obra maestra de Karim Benzema en el minuto 13 tras rematar espectacularmente con un taconazo un servicio perfecto de Lucas Vázquez desde la banda derecha. Pero la falla de Alba, al entregarse en la cobertura, y la de Araújo, al no cubrir con más propiedad a Benzema, dejaron muy claro de qué pie cojea el equipo de Koeman.
El Barcelona reaccionó de la única manera que tiene disponible, buscando a Messi. Pero no tuvo suerte, ni apoyo, como ya es costumbre.
MÁS FALLAS
Del otro lado, un tiro libre de Toni Kroos en el 28 aumentó la ventaja del Real Madrid, tras golpear el balón en la espalda de Sergiño Dest y colarse en la portería de Marc-André ter Stegen, sin que Alba pudiera despejar en la línea de gol.
El Barcelona, que saltó a la cancha sin Griezmann ni Piqué, insistió en buscar un gol antes del descanso, y estuvo muy cerca Messi de anotar un gol olímpico y luego con un remate en el área que atajó muy bien Courtois.
OXÍGENO
Griezmann entró en el segundo tiempo en lugar de Sergiño Dest, movimiento obligado para buscar remontar la desventaja.
Con un poco de suerte, el gol del Barcelona llegó con un invitado inesperado, cuando Óscar Mingueza remató en el corazón del área un centro de Alba que dejó pasar Griezmann para el 2-1 en el 60. Media hora para buscar un empate o una remontada que sería histórica.
Quedó claro que el Real Madrid apostaría al contragolpe. Pero el Barcelona asumió los riesgos de descubrir su zona baja y sacó a Busquets para que entrara Sergi Roberto.
Mingueza estuvo muy cerca del empate en el 71, con un tiro desde la derecha que pasó demasiado cruzado.
CAMBIOS AL POR MAYOR
Zidane hizo un rudo movimiento triple. Sacó a Vinicius, Kroos y Benzema, para el ingreso de Marcelo, Mariano e Isco. Koeman respondió al mismo tiempo metiendo a Ilaix Moriba en lugar de Araújo. Pedri salió para dar paso a Trincao.
Braiwaite, que entró por Dembélé, provocó la acción polémica del final, cuando cayó en el área tras un contacto mínimo de Mendy que todo el Barcelona quería que se señalara como penalti, lo cual descartó el VAR.
En el minuto final, Casemiro recibió dos tarjetas amarillas y la consiguiente expulsión. La última jugada fue digna de un Clásico, cuando Ter Stegen fue al ataque e Ilaix Moriba remató al travesaño, pero no hubo más opciones y el Real Madrid pudo celebrar el triunfo ante Barcelona, ahogado bajo una pertinaz lluvia.