La selección de España sufrió de nueva cuenta para hacer efectivo su dominio en la cancha y apenas pudo empatar 1-1 ante Polonia, con un gol del cuestionado Álvaro Morata, pero con un penalti fallado por Gerard Moreno que pone en riesgo su pase a octavos de final.
España controló grandes tramos del partido, con su característica posesión de balón, pero sin mucha dinámica, salvo la que le imprimían Moreno o Pedri.
La confianza depositada en Álvaro Morata rindió frutos, luego de las críticas entre la afición de España por sus constantes fallas, pero más allá del gol ante Polonia, el delantero volvió a dejar dudas y podría costarle a su selección el pase a octavos.
Morata se quitó el maleficio en el minuto 26, al rematar dentro del área un servicio de Gerard Moreno, el mejor de España, desde la banda derecha, que celebraron en el estadio tras revisar el VAR y darlo por válido.
Esta tanto premió el dominio en el primer tiempo de España, que fue de menos a más. Pero la reacción de Polonia dejó un susto antes del descanso y avisaba el despertar de Robert Lewandowski.
DESCUIDO
Esa última falla del primer tiempo dejó un aviso que España no atendió. Un centro desde la derecha encontró a Lewandowski, quien se suspendió en el aire y remató con la cabeza, para enviar el balón pegado al poste izquierdo del marco español, en el minuto 54.
Pero los problemas de España seguirían acumulándose. Un penalti que falló Gerard Moreno también lo desperdició Morata, quien recibió el rebote y no atinó a empujar al marco vacío.
La presión creció en ambas áreas. Pero todos se guiaban por la desesperación al ver que el tiempo se terminaba, ya que el 1-1 los deja en peligro de eliminación.
Morata sali cerca del final. El veredicto fu dividido, ya que recibió abucheos y aplausos, pero le dará a Luis Enrique otro motivo para volver a pensar si lo usa como titular ante Eslovaquia en el último partido del Grupo E, donde necesitan ganar para asegurar su pase a octavos.