El Bayern Munich pasó un gran susto en el Red Bull Arena de Austria, aunque un gol en el último minuto de Kingsley Coman aplacó el empuje del FC Salzburg, que tenía la ventaja desde el minuto 20 gracias a Chikwubuike Adamu, y ahora se resolverá todo en Alemania, con un empate 1-1 que ya no parece tan complicado de remontar para el gigante bávaro.

Como era obvio, el Bayern Munich terminó por arrinconar a su rival, que tuvo más ocasiones al contraataque, y en el último minuto encontró el empate salvador gracias al internacional francés Coman para igualar el duelo que aún debe refrendar en la vuelta del Allianz Arena.

El inicio del encuentro estuvo marcado por un enérgico juego de ambos equipos que desarrollaron buenas oportunidades de gol.

En el minuto 11, el delantero suizo del FC Salzburg, Noah Okafor, tuvo que abandonar el encuentro por una lesión en el muslo derecho. En su lugar entró el joven Junior Adamu, de la cantera del Salzburg.

Sólo 10 minutos más tarde, el delantero de origen nigeriano marcó el tanto del FC Salzburg con un derechazo por encima del arquero Ulreich, tras un pase de Adeyemi.

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El resto de la primera parte vio varias oportunidades más de los locales, pero también algunas de los alemanes.

APLANADORA

El Bayern salió tras el descanso con más fuerza y más determinación. Pero no fue la aplanadora de otras ocasiones.

Una y otra vez, los alemanes penetraron el área del Salzburg, sobre todo con Coman, que causó mucho peligro y arrinconó al conjunto local.

Tras un saque de esquina de los austríacos, Sané estuvo a punto de marcar en el contragolpe en el minuto 72. Pero poco más tarde, los locales estuvieron a punto de marcar un esperado segundo tanto, pero ni Adeyemi y Adamu lograron superar a Ulreich en un contragolpe que el Bayern salvó bajo palos.

Cuando los casi 30 mil espectadores ya pensaban haber presenciado una histórica victoria del FC Salzburg, llegó un centro Pavard, que dejaba a Coman en el área en posición perfecta para marcar el empate en el minuto 90 para salvar milagrosamente al Bayern Munich de una derrota histórica.

El partido de vuelta se jugará dentro de tres semanas en la Allianz Arena de Munich.