EFE.- Desde que el Manchester City perdió con el Chelsea la final de la Liga de Campeones en 2021, los ‘Sky Blues’ cuentan sus enfrentamientos contra los londinenses por victorias.
La última, este domingo en la tercera ronda de la FA Cup, en un encuentro dominado de principio a fin por el City y finiquitado con una goleada 4-0 que deja tiritando al entrenador de los 'Blues' Graham Potter.
El técnico inglés, que se enfrentó a un periodista en la previa del encuentro por las críticas a su equipo, está en un delicado momento, tras perder por tercera vez esta temporada ante el City, dos de ellas en apenas cuatro días.
Después de que los ‘citizens‘ se llevaran los tres puntos de Stamford Bridge el jueves, gracias a un gol de Riyad Mahrez, en su feudo de Manchester la diferencia fue mucho mayor. El propio Mahrez, que le ha marcado al Chelsea en los tres partidos de este curso, Julián Álvarez y Phil Foden redondearon el triunfo de un equipo que sigue vivo en todas las competiciones y aspira a otra temporada histórica.
Te puede interesar…
Raúl Jiménez regresa a la titularidad con Wolverhampton, que forza desempate ante Liverpool en la Copa de la Liga
En una de las mejores primeras partes de lo que va de campaña, el City se adelantó con un magistral lanzamiento de falta de Mahrez, que clavó la pelota en un ángulo sin que Kepa pudiera hacer nada. El tiro fue tan bueno que hasta Conor Gallagher se echó las manos a la cabeza.
El tanto abrió un periodo de 15 minutos en el que el Chelsea se tambaleó y se quedó aturdido, a merced de un City que no perdonó. Una mano de Havertz en un salto con Laporte en un córner propició el 2-0. No vio el árbitro el penalti, pero sí el VAR, y Álvarez, tras un intento de desestabilización verbal de Kepa, no falló. El español estuvo cerca de pararlo.
Entonces sí desapareció el conjunto ‘Blue’, que bajó los brazos y recibió otro manotazo, esta vez con el sello de identidad del equipo de Guardiola. Rodri cambió el juego para la llegada de Mahrez por el perfil derecho. El argelino, dentro del área, aguantó el balón hasta que Walker le dobló. Le entregó la pelota y éste puso unl pase raso para que Foden solo tuviera que empujarla. Jugada de futbolín para sentenciar el partido.
La segunda mitad fue mucho más tranquila y solo se alteró cuando Kalidou Koulibaly derribó a Foden dentro del área cometiendo otro penalti. No lo lanzó Álvarez, sino Mahrez, que estrelló la pelota en la red para redondear la goleada y confirmar el dominio del City sobre el Chelsea.
Desde la final de Oporto, cinco partidos, cinco victorias para el City. Nueve goles a favor y ninguno en contra para los de Guardiola, que se medirán en la cuarta ronda del torneo copero al ganador de la eliminatoria entre Oxford United y Arsenal.