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La árbitra turca suspendida de por vida tras difusión de un video íntimo, afirma ser víctima de “un atentado contra el honor de una mujer”
Sábado 12 de Octubre de 2024
SIGUE EL ESCÁNDALO

La árbitra turca suspendida de por vida tras difusión de un video íntimo, afirma ser víctima de “un atentado contra el honor de una mujer”

Elif Karaarslan, de 24 años, rechazó ser la mujer que aparece en un video íntimo con un directivo del arbitraje en Turquía, lo que le costó la carrera a ambos.

Elif Karaarslan, árbitra turca.Créditos: IG Elif Karaarslan
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Elif Karaarslan, árbitra turca de 24 años que fue suspendida de por vida por la Asociación de Futbol de su país luego de que se hizo público un video íntimo en el que presuntamente aparece con Orhan Erdemir, de 61 años, un supervisor de arbitraje, negó ser la protagonista de dichas imágenes y anunció que se defenderá de todos los ataques de los que está siendo objeto.

"No soy la persona que aparece en el video y el hecho de que me enfrente a una acusación tan grave es un atentado contra el honor de una mujer. Defenderé mi causa hasta el final. Soy sólo una de las muchas que están siendo perjudicadas y  espero ser la última.

"Me espera un largo camino legal, pero lo superaré de la forma más fuerte y contundente. Espero contar con todo su apoyo y amor en este proceso. Llorar, gritar y estar triste no son cosas que yo haría, no soy así”, dijo la exfutbolista del Besiktas en un mensaje.

Previamente Karaarslan, a través de sus abogados, aseguró que el video fue hecho con Inteligencia Artificial.

"Se publicó un video creado íntegramente a través de inteligencia artificial a partir de la cuenta de redes sociales de otra persona, sin relación con mi cliente. Cuando se examina el video queda muy claro que la imagen no es clara y que las partes de la relación fueron editadas completamente por ordenador”.

Por su parte Orhan Erdemir, el inspector de árbitros implicado en el video, también rechazó que las imágenes sean reales y se refirió al impacto que ha tenido este escándalo en su vida profesional y personal.

“Mi carrera como árbitro y observador, que he mantenido con orgullo durante más de 30 años sin una sola mancha, ha dado un vuelco. Mi reputación ante los ojos de mi familia, mi círculo de amigos y la comunidad arbitral ha sido destruida”, aseguró.