Mucho se especuló sobre si el corredor Derrick Henry podría llegar a los Cowboys para la temporada 2024. El exjugador de Titans era agente libre sin restricciones durante la temporada baja, incluso se entrenaba en la ciudad de Dallas durante su tiempo libre, pero el equipo de la estrella solitaria no se interesó en sus servicios y el dueño Jerry Jones aceptó que todo se debió al tope salarial.

“No podíamos pagarle a Derrick Henry. ¿Por qué no? No sé. ¿Por qué no puedes comprar una mansión cuando vives en un tipo diferente de casa? No podíamos permitírnoslo. No podemos hacer que todo encaje. Es tan simple como eso”, indicó el propietario de los Cowboys tras el partido que su equipo perdió 28-25 ante los Ravens.

Y Derrick Henry dio una gran muestra de su poderío tras correr para 151 yardas y lograr un par de touchdowns por tierra en 25 acarreos, fue la pieza fundamental para la victoria de Baltimore en el estadio de Dallas.

De acuerdo a reportes de la prensa que sigue a los Cowboys, el contrato de Derrick Henry le habría costado 16 millones de dólares a la franquicia, pero prefirieron ahorrarse ese dinero, ya que tampoco estaban dispuestos a pagar los 24 millones que Tony Pollard solicitaba por renovar. En su lugar repatriaron a Ezekiel Elliot de los Patriots en un acuerdo por un año y tres millones.

Y es que para los Cowboys la necesidad era amarrar a sus grandes estrellas como el quarterback Dak Prescott y el receptor Ceedee Lamb, quienes terminaron por abarcar gran parte del tope salarial del equipo. Sin embargo, Jerry Jones no culpabiliza al ataque terrestre de la derrota ante los Ravens.

“No dirigiría la falta de juego terrestre o dónde hemos estado en los últimos juegos en específico a algún corredor, porque se necesitan algunos linieros ofensivos para sacarlos de allí; se necesita un juego de pases para mantenerlos involucrados en el juego. Se necesitan muchas cosas para que eso funcione. Esto no se resolvería simplemente trayendo a un miembro del Salón de la Fama como Jimmy Brown”, sentenció.