Reuters.- El peso mexicano se apreció el miércoles con mayor fuerza que sus pares latinoamericanas y la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) subió tras una sesión errática, marcada por una pausa en una escalada de los precios de las materias primas, que impulsó la demanda por activos de riesgo.

Las materias primas bajaron después de haberse disparado a máximos de varios años debido a las preocupaciones sobre el suministro mundial ante el conflicto entre Rusia y Ucrania, dos importantes productores de energía, metales y cultivos.

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El tipo de cambio cotizaba en 20.9047 por dólar casi al final de los negocios, con una ganancia de un 2.17%, su mejor desempeño desde mediados de junio de 2020 y poniendo fin a una racha de cuatro jornadas de pérdidas que la llevaron a tocar en la víspera su peor nivel desde inicios de diciembre.

“Los operadores aprovechan la pausa en el ‘rally’ alcista de los precios de materias primas para realizar compras de oportunidad en el mercado cambiario mexicano, pero debido al escenario complejo y de altos riesgos no se pueden descartar nuevos episodios de presión”, dijo CI Banco en un reporte.

Analistas también atribuyeron el fortalecimiento del peso a la divulgación de cifras mayores a lo esperado de la inflación local de febrero que fortalecieron las expectativas de nuevas alzas a la tasa clave de interés. 

El referencial índice accionario S&P/BMV IPC subió un 1.17% a 53 mil 911.76 puntos, en su segunda sesión seguida de ganancias, con un retorno acumulado del 3.6%. Por la mañana, la bolsa llegó a avanzar un 1.34%.

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Contrario al comportamiento generalizado del mercado destacaron los títulos de dos de las principales compañías mineras del país.

Los papeles de Industrias Peñoles se hundieron un 10.10% a 274.33 pesos, seguidos por los de Grupo México que restaron un 2.45% a 114.42 pesos.

En el mercado de deuda, el rendimiento del bono a 10 años bajó 11 puntos base a un 8.36%, mientras que la tasa a 20 años descendió 21, a un 8.53%.