La candidata a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México por Morena, Clara Brugada, fue interrumpida este martes por Rafael Ponfilio Acosta Ángeles, mejor conocido como “Juanito”, en su presentación de estrategia de seguridad que implementará en la capital.

En el exconvento de San Hipólito, donde fue el evento de Clara Brugada, “Juanito” robó la atención por unos segundos y puso nerviosa a la candidata morenista cuando empezó a gritar varias veces: "Vengo a recordarle cuando me robó Iztapalapa".

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En respuesta, Brugada, sólo llamó la atención de los presentes exclamando: “A ver compañeras y compañeros, por favor, vamos a continuar, vamos a continuar”.

Personal de seguridad del evento refiere que “nadie se dio cuenta” del ingreso del experredista “porque se tapó la cara” y en medio del discurso de Brugada empezó a gritar, de inmediato fue interceptado para salir del evento por la puerta de servicio.

“Suéltame, me robo Iztapalapa. Déjenme en paz”, gritaba al personal de seguridad que lo empujaba y golpeaba en la espalda. Finalmente, el experredista fue llevado a la salida y acabó su protesta.

Brugada, la favorita del presidente Andrés Manuel López Obrador, recibió ayuda anteriormente para alcanzar un cargo público.

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En 2009, cuando ambos militaban en el Partido de la Revolución Democrática (PRD), integrantes del partido impugnaron el registro de Brugada, quien ya era candidata a jefa delegacional por Iztapalapa, y lograron que Silvia Oliva representara al partido.

Ante ello, López Obrador ideó una estrategia para que su candidata prevaleciera: pidió al Partido del Trabajo (PT) que presentara como candidato a Rafael Acosta, conocido como “Juanito”, pidió a sus simpatizantes que votaran por él y luego lo comprometió a que dejara el cargo para que Clara fuera la gobernante.

Esa simulación permitió que su favorita gobernara y dejó un término para la picaresca política, los “Juanitos”, para identificar a candidatos que después son suplantados por el favorito.

Con información de Amado Azueta