Por Ivette Solórzano
Ante una audiencia escasa, la candidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, acusó a Morena de no dejar pasar el transporte que llevaba a la población que vive en la sierra de Chiapas hacia el municipio de Huixtla, donde tuvo un mitin de campaña.
Acompañada de Jesús Zambrano, líder nacional del PRD, Gálvez aseguró que a pesar de la poca asistencia, ellos decidieron mantener el evento.
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“Aquí estoy, mi equipo me decía: 'Oye es que no va a estar tan lleno, es que no están dejando pasar el transporte, es que el evento va a estar bien sólo'. Así hubiera uno, estaría yo aquí; nunca voy a abandonar un evento, con una persona que venga a escucharme, me basta”, dijo la candidata ante los simpatizantes que sí lograron llegar al mitin.
“Sabiendo que es una hora difícil y que además nuestros adversarios hicieron de las suyas en una gran parte para evitar que gente de las zonas cercanas se trasladarán en transporte público para llegar aquí”, acusó por su parte Jesús Zambrano.
Según la candidata y el líder del PRD, coordinadores territoriales les informaron que estaban teniendo algunas dificultades con el transporte que baja de la sierra.
No obstante, algunos habitantes que acudieron al mitin le exigieron a la candidata que los apoye con seguridad.
“¿Ustedes creen que yo no he sido perseguida, intimidada? ¡Se han metido con todo! Con mis hijos, con mi marido, con mi patrimonio, con mi empresa y no me han encontrado nada, necesitamos mandar desde aquí un mensaje a todos los chiapanecos: se le acabaron los abrazos a los delincuentes”, prometió Gálvez a los habitantes.
Y casi al finalizar el mitin, la candidata invitó a los chiapanecos a creer en su proyecto de país.
“Abran los ojos, despierten. Despierten, chiapanecos. No merecen sus hijos su cobardía. No merecen sus hijos que ustedes no den la pelea”, exclamó.
Después de su mitin en Huixtla, la candidata partió hacia su último evento del día, en Tonalá, trayecto en el que decidió descender de su camioneta en un retén militar, donde se dirigió a los soldados y les dijo: “Ustedes sí son los de verdad”.