Por Marco Antonio Duarte / Corresponsal
Michoacán.- María Salud Valencia Solís, candidata del Partido Encuentro Solidario (PES) a la alcaldía del municipio michoacano de Nuevo Urecho, denunció presuntas amenazas de muerte por parte del hijo de la actual presidenta municipal morenista, Carmen Carrillo Gaytán, quien busca la reelección.
Valencia Solís, quien se desempeña como profesora de preparatoria, presentó la denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) en contra de Brandon Vieyra Carrillo, hijo de la alcaldesa Carmen Carrillo, por presuntamente exigirle el 29 de abril a Martín García Gómez, candidato a síndico suplente, retirarse de la contienda, o de lo contrario “le iban a echar a la maña”.
Lee también: Sheinbaum cancela visita a Apatzingán, epicentro del conflicto entre organizaciones criminales en Michoacán
La denunciante explicó ante el Ministerio Público que el mismo 19 de abril, Brandon Vieyra al parecer amedrentó a habitantes del poblado de Tipítaro para que no asistieran a su acto de arranque de campaña, realizado un día después en la plaza de la comunidad.
La candidata del PES relato que, al realizar su inicio de campaña, un hombre de aproximadamente 60 años y apodado como “El Chucky”, le pidió a ella y al candidato a síndico suplente, Martín García, retirarse de la plaza de Tipítaro, por presuntas instrucciones de la presidenta municipal.
María Salud Valencia además mencionó que el pasado 23 de abril, su padre Cirilo Valencia Cárdenas y su hermana Rosa Valencia Solís, recibieron amenazas a través de llamadas telefónicas, en las que los sujetos argumentaron hablar de parte de la actual alcaldesa, quien busca la reelección por la alianza Morena, PT y PVEM.
Nuevo Urecho es un municipio que se ubica entre el centro del estado y la región de Tierra Caliente, donde opera la organización criminal autodenominada como Pueblos Unidos.
Te sugerimos: Suman 19 renuncias de candidatos del PAN, PRI y PRD en Michoacán por presuntas amenazas del crimen organizado
En Michoacán, suman 66 candidatos con escoltas policiales o militares, ante presuntas amenazas de muerte por parte del crimen organizado.
Los candidatos son escoltados a reuniones, actos proselitistas e, incluso, a actividades familiares o personales, por un total de 283 agentes de la Guardia Civil (Policía Estatal), Guardia Nacional y el Ejército mexicano.
Además, Michoacán acumula 33 renuncias de aspirantes a presidentes municipales, de seis partidos políticos, todas por presuntas amenazas de muerte.