Reuters.- El príncipe Harry, el cantante Elton John y otras cinco celebridades británicas pueden llevar a juicio su demanda contra la editorial del periódico Daily Mail por presunta conducta ilegal generalizada, dictaminó el viernes el Tribunal Superior de Londres.
La empresa editora, Associated Newspapers (ANL), había solicitado en la audiencia celebrada en marzo que se desestimara el caso, alegando que las demandas presentadas en octubre de 2022 estaban fuera del plazo de seis años para emprender acciones legales.
Recomendamos: El príncipe Harry conmemora un año de la muerte de su abuela Isabel II visitando la capilla donde está enterrada
Harry, el hijo menor del rey Carlos, Elton John, y los otros cinco demandantes acusan a ANL, que publica el Daily Mail y el Mail on Sunday, de espionaje telefónico y otras graves violaciones de la intimidad que se remontan a hace 30 años. ANL siempre ha negado su implicación en prácticas ilegales.
“Considero que cada demandante tiene una posibilidad real de demostrar la ocultación por parte de Associated que no fue \u2015y no podría haber sido con diligencia razonable\u2015 descubierta por el demandante pertinente antes de octubre de 2016″, dijo el juez Matthew Nicklin en su sentencia.
Sin embargo, Nicklin dictaminó que los siete demandantes no podían basarse en los libros de contabilidad que registran los pagos de ANL a investigadores privados, que fueron revelados en una investigación pública sobre las normas de prensa que comenzó en 2011, sin obtener primero el permiso de los ministros del gobierno británico.
El 21 de noviembre se celebrará una audiencia para examinar el resultado de la sentencia.
Te puede interesar: El príncipe Harry revela cómo enfrentó el trauma por la muerte de su madre en un nuevo documental de Netflix
En sus alegaciones, el príncipe y los demás demandantes detallaron una serie de supuestas actividades ilegales llevadas a cabo por periodistas del Mail o por 19 investigadores privados que trabajaron para ellos desde 1993 hasta 2011 y después, que iban desde espiar sus llamadas telefónicas y poner micrófonos ocultos en sus casas hasta obtener historiales médicos mediante engaño.
El abogado de Associated ha declarado que la editorial rechaza las acusaciones “en su totalidad”.
Las escuchas telefónicas salieron a la luz pública por primera vez en 2006, cuando el corresponsal real y un investigador privado que trabajaban para un tabloide dominical propiedad de News Group Newspapers (NGN), de Rupert Murdoch, fueron detenidos y posteriormente condenados por acceder a los mensajes de voz de los teléfonos móviles de asesores de la realeza.
Las revelaciones posteriores, cinco años después, obligaron a Murdoch a cerrar el periódico, provocaron el encarcelamiento de su director y de otras personas, una investigación pública sobre las normas de la prensa y el pago de millones de libras en concepto de daños y perjuicios por parte de NGN y Mirror Group Newspapers, a los que Harry también ha demandado.