AP.- Se prevé que los lagos artificiales que almacenan agua y abastecen a millones de personas en el oeste de Estados Unidos y México se reduzcan a mínimos históricos en los próximos meses, cayendo a niveles que podrían desencadenar la primera declaración oficial de escasez del gobierno federal y recortes al servicio en Arizona y Nevada.
La Oficina de Reclamación del Departamento del Interior publicó proyecciones de 24 meses esta semana que pronostican que menos agua del río Colorado caerá desde las montañas Rocosas a través del lago Powell y el lago Mead y hacia los áridos desiertos del suroeste de EU y el golfo de California. Se espera que los niveles de agua en los dos lagos caigan en picada lo suficiente como para que la agencia declare una escasez oficial por primera vez, lo que amenaza el suministro de agua de ciudades y granjas que dependen del río Colorado.
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Expertos consideran que la escasez es provocada por el cambio climático, ya que menos nieve fluye hacia el río y sus afluentes, y las temperaturas más altas resecan el suelo y hacen que más agua del río se evapore a medida que fluye a través del oeste estadounidense, que es asolado por sequías.
El modelo de la agencia proyectó que el lago Mead caerá en junio por debajo de los 1 mil 75 pies (328 metros) por primera vez. De llegar a ese nivel, los funcionarios estiman que se dará la declaración de escasez bajo acuerdos negociados por siete estados que dependen del agua del río Colorado: Arizona, California, Colorado, Nevada, Nuevo México, Utah y Wyoming.
Los funcionarios federales emiten regularmente proyecciones a largo plazo, pero utilizan las publicadas en agosto de cada para tomar decisiones sobre cómo asignar el agua del río. Si las proyecciones no mejoran para entonces, la Oficina de Reclamación declarará una condición de escasez de Nivel 1 y los recortes se implementarían en enero de 2022.
Arizona y Nevada han renunciado voluntariamente al agua en virtud de un plan de contingencia de sequía para el río firmado en 2019. Una declaración de escasez sometería a los dos estados de EU a sus primeras reducciones obligatorias. Ambos dependen del río Colorado más que de cualquier otra fuente de agua, y Arizona puede perder aproximadamente un tercio de su suministro.
Los funcionarios de la agencia del agua dicen que confían en que sus medidas de preparación, incluida la conservación y la búsqueda de fuentes alternativas, les permitirían resistir los recortes si la sequía persiste como se esperaba.
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“El estudio, aunque significativo, no es una sorpresa. Refleja los impactos de las condiciones secas y cálidas en la cuenca del río Colorado este año, así como los efectos de una sequía prolongada que ha afectado el suministro de agua del río Colorado”, dijeron las autoridades del Departamento de Recursos Hídricos de Arizona y el Proyecto de Arizona Central, dijo en un comunicado conjunto.
En Nevada, la agencia que suministra agua a la mayor parte del estado ha construido “pajitas” para sacar agua de más abajo en el lago Mead a medida que descienden los niveles. También ha creado un sistema de crédito en el que puede depositar agua reciclada en el depósito sin que cuente para su asignación.
Colby Pellegrino, director de recursos hídricos de la Autoridad del Agua del Sur de Nevada, aseguró a los clientes que esas medidas de preparación los protegerían de los efectos de los recortes. Pero advirtió que se necesitaban más acciones.
“Depende de todos los usuarios del río Colorado encontrar formas de conservar”, dijo Pellegrino en un comunicado.
La Oficina de Reclamación también proyectó que el lago Mead caerá al punto que les preocupaba que en el pasado pudiera amenazar la generación de electricidad en la presa Hoover. La energía hidroeléctrica sirve a millones de clientes en Arizona, California y Nevada.
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Para prepararse para un futuro con menos agua, la oficina ha pasado 10 años reemplazando partes de cinco de las 17 turbinas de la presa que giran para generar energía. Len Schilling, administrador de la presa de la oficina, dijo que la adición de turbinas de cabeza ancha permite que la presa funcione de manera más eficiente a niveles de agua más bajos. Dijo que las turbinas podrán generar energía casi hasta un punto llamado “deadpool”, cuando no habrá suficiente agua para que la presa funcione.
Pero Schilling señaló que entre menos agua se mueve a través de la presa Hoover, menos energía hidroeléctrica hay para circular. "A medida que disminuye la elevación en el lago, nuestra capacidad de producir energía también disminuye porque tenemos menos agua empujando las turbinas", dijo.
La energía hidroeléctrica cuesta sustancialmente menos que la energía vendida en el mercado eléctrico mayorista porque el gobierno cobra a los clientes solo por el costo de producción y mantenimiento de la presa.
El gerente general del distrito de energía del condado de Lincoln, Dave Luttrell, dijo que las actualizaciones de infraestructura, menos energía hidroeléctrica de la presa Hoover y energía suplementaria de otras fuentes como el gas natural aumentaron los costos y alarmaron a los clientes en su distrito rural de Nevada.
"Las economías rurales en Arizona y Nevada viven de la energía hidroeléctrica que se produce en la presa Hoover. Puede que no sea un gran problema para NV Energy (la empresa de servicios públicos más grande de Nevada). Podría ser un punto decimal para el Departamento de Agua y Energía de Los Ángeles. Pero para el condado de Lincoln, es un gran impacto”, dijo.