EFE.- La Legislatura de California votará este lunes el presupuesto de más de 262 mil millones de dólares, que incluirá fondos para expandir el programa de salud pública Medi-Cal a residentes mayores de 50 años del estado, sin importar su estatus migratorio.

El gobernador de California, Gavin Newsom, y los líderes demócratas de la Legislatura llegaron a un acuerdo el viernes pasado sobre la aprobación de un presupuesto estatal por 262 mil 600 millones.

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Los fondos incluyen la medida a favor de los indocumentados lo que convertiría a California en el primero en el país en otorgar un programa de salud pública a los migrantes mayores de 50 años. El estado ya brinda esta ayuda a menores y adultos jóvenes sin estatus legal.

La expansión de Medi-Cal, el programa de atención médica del estado para residentes de bajos ingresos, a cualquier persona mayor de 50 años independientemente de su estado migratorio, es una victoria de los legisladores demócratas, que buscaban ampliar los beneficios a los migrantes sin documentos. Si el presupuesto es aprobado este lunes, Newsom podría firmarlo a más tardar el jueves 1 de julio.

Medi-Cal es la versión de California del programa Medicaid para personas de bajos ingresos. En mayo de 2016, el estado comenzó a ofrecer cobertura completa a niños y jóvenes migrantes sin papeles hasta los 19 años, financiada con fondos estatales. Casi 129 mil se inscribieron en el programa en marzo de 2019, según los datos disponibles.

Cuando debatieron el presupuesto del 2019 los legisladores votaron para usar más fondos estatales para expandir el programa a todos los adultos elegibles por ingresos de entre 19 y 25 años, lo que convirtió a California en el primer estado en ofrecer cobertura completa de Medicaid a migrantes adultos.

A comienzos el año pasado los esfuerzos se concentraban en expandir el programa de salud pública a los indocumentados mayores de 65 años, pero la llegada de la pandemia del coronavirus obligó a poner un freno a los esfuerzos.

En contraste, el estado de Illinois en medio del brote de la Covid-19, se convirtió en el primer estado de Estados Unidos en extender el seguro médico público a todos los adultos mayores de 65 años no ciudadanos de bajos ingresos, incluso si son indocumentados.

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