Después de 10 meses de aumentos anuales en la tasa de inflación de Estados Unidos, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró su primer descenso respecto al mes previo, al pasar de 5.4% julio a 5.3% en agosto, informo la Oficina de Estadísticas Laborales de ese país.

En términos mensuales, la inflación avanzó 0.3%, de julio a agosto, la menor en siete meses. Economistas coinciden que podría haber tocado techo el alza en los precios y podría darse una desaceleración en los meses posteriores.

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Según la oficina, la energía continuó siendo uno de los rubros que más incidió en el ajuste anual, con un 25% de alza. La gasolina fue uno de los productos con la mayor alza para el consumidor en un año. Subió 42.7% anual, mayor a lo observado en julio de 41.8%.

En tanto, el gas natural tuvo su mayor incremento anual de 21.1%, registro que no se daba desde finales de 2008.

En tanto, la inflación subyacente, la que descuenta la energía y los alimentos, pasó de julio a agosto de 4.3% a 4% anual.

La inflación anual de julio y junio se mantuvo en 5.4% y fue la mayor alza de precios en los últimos 13 años, según los registros de la dependencia gubernamental estadounidense.

La Reserva Federal de Estados Unidos ha dicho que la alta inflación es transitoria, no obstante, reconoció que se había extendido más de lo previsto.

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