AP.- Un juez federal bloqueó el viernes el intento de la administración del presidente Joe Biden de poner mayor énfasis en el daño potencial de las emisiones de gases de efecto invernadero al crear reglas para las industrias contaminantes.
El juez federal de distrito, James Cain del Distrito Oeste de Luisiana, designado por el expresidente Donald Trump, se puso del lado de los fiscales generales republicanos de los estados productores de energía, quienes dijeron que la acción de la administración de aumentar el costo estimado de las emisiones de carbono amenazaba con aumentar los costos de energía y disminuir los ingresos estatales por la producción de energía.
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El fallo del viernes de Cain, sigue a un fallo de otro juez de Luisiana del verano pasado cuando anuló un intento separado de Biden de abordar las emisiones de gases de efecto invernadero mediante la suspensión de nuevos arrendamientos de petróleo y gas en tierras y aguas federales. En aquella ocasión fue el juez federal de distrito Terry Doughty, también designado por Trump.
El juez Cain emitió una orden judicial que prohíbe a la administración Biden utilizar la estimación de costos más alta, que asigna un valor en dólares a los daños causados \u200b\u200bpor cada tonelada adicional de gases de efecto invernadero emitida a la atmósfera.
El presidente Joe Biden, en su primer día en el cargo, restauró la estimación del costo climático a alrededor de 51 dólares por tonelada de emisiones de dióxido de carbono, después de que la administración Trump redujera la cifra a alrededor de 7 dólares o menos por tonelada.
La estimación se usaría para dar forma a las reglas futuras para la perforación de petróleo y gas, automóviles y otras industrias. El uso de una estimación de costos más alta ayudaría a justificar las reducciones en las emisiones que causan el calentamiento del planeta, al hacer que los beneficios superen los costos de cumplir con las nuevas reglas.
Conocido como el costo social del carbono, la cifra de daños utiliza modelos económicos para capturar los impactos del aumento del nivel del mar, las sequías recurrentes y otras consecuencias del cambio climático.
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La estimación de 51 dólares se estableció por primera vez en 2016 y se usó para justificar reglas importantes como el Plan de Energía Limpia, el esfuerzo característico de Obama para abordar el cambio climático al endurecer los estándares de emisiones de las centrales eléctricas de carbón, y reglas separadas que imponen estándares de emisiones de vehículos más estrictos.
La Corte Suprema bloqueó el Plan de Energía Limpia antes de que entrara en vigencia, y una regla más indulgente impuesta por la administración Trump fue posteriormente desestimada por una corte federal de apelaciones.
La estimación del costo del carbono aún no se había utilizado mucho bajo el mandato de Biden, pero se está considerando en una revisión ambiental pendiente de las ventas de arrendamiento de petróleo y gas en los estados del oeste.
En el fallo del viernes, Cain escribió que el uso de la cifra de daños climáticos en las revisiones de arrendamientos de petróleo y gas “aumentaría artificialmente las estimaciones de costos de las ventas de arrendamientos” y causaría un daño directo a los estados productores de energía.
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El economista Michael Greenstone, quien ayudó a establecer el costo social del carbono mientras trabajaba en la administración de Obama, dijo que si se mantiene el fallo, sería una señal de que Estados Unidos nuevamente no está dispuesto a enfrentar el cambio climático.
“El costo social del carbono guía el rigor de la política climática”, dijo el profesor de la Universidad de Chicago. “Establecerlo en niveles de administración de Trump cercanos a cero elimina efectivamente todos los dientes de las regulaciones climáticas”.