AP.- El sindicato United Auto Workers intensificó significativamente su huelga contra las tres automotrices más grandes de Detroit, suspendiendo las labores en la fábrica más grande de Ford y amenazando a la fabricante de Jeep, Stellantis.
En una acción sorpresa realizada el miércoles por la noche, 8 mil 700 miembros del sindicato abandonaron sus puestos en la planta de camionetas de Ford, en Louisville, Kentucky.
Te puede interesar: Sindicato automotriz UAW detiene ampliación de huelga tras concesión de GM sobre plantas de baterías para vehículos eléctricos
Y el jueves por la mañana, el presidente del sindicato, Shawn Fain insinuó que se tenían previstas más acciones contra Stellantis. "Esperamos que las negociaciones con Stellantis hoy sean más productivas que las que tuvimos con Ford ayer", escribió Fain en X, anteriormente conocido como Twitter, sin decir lo que podría pasar.
La planta de camionetas de Ford fabrica los modelos pesados de la serie F y grandes todoterrenos Ford y Lincoln, los productos más lucrativos de la empresa. Los vehículos fabricados en la planta generan unos ingresos de 25 mil millones de dólares al año, según informó la empresa en un comunicado.
Fain dijo en un comunicado que el sindicato ha esperado lo suficiente "pero Ford no ha captado el mensaje" para negociar un contrato justo. "Si no pueden entender eso después de cuatro semanas, los 8 mil 700 trabajadores que cierran esta planta extremadamente rentable les ayudarán a entenderlo", dijo Fain.
La huelga se produjo casi cuatro semanas después de que el sindicato iniciara sus paros contra General Motors, Ford y Stellantis el 15 de septiembre, con una planta de montaje de cada empresa.
Sigue leyendo: Proveedores de la industria automotriz en EU estiman despidos en 30% de las empresas del sector por huelga de la UAW
La compañía, sin embargo, señaló que la expansión de la huelga era “sumamente irresponsable“y dijo que ha hecho fuertes ofertas de sueldo y prestaciones al sindicato. Añadió que la acción coloca a otra decena de instalaciones de Ford en riesgo, así como partes de las plantas de suministro, que en conjunto dan empleo a más de 100 mil personas.