EFE.- Un niño de tres años murió a bordo de un autobús que llevaba migrantes hacia Chicago, confirmó este viernes el Departamento de Salud Pública de Illinois (IDPH, sigla en inglés) a medios locales.
El deceso ocurrió el jueves en un autobús que estaba cerca de su destino, informó el periódico Chicago Tribune.
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Un funcionario del IDPEH confirmó al rotativo que el niño murió cuando el vehículo ingresaba al área de Chicago.
“El IDPH está trabajando con los funcionarios de salud locales, la policía estatal y las autoridades federales en la mayor medida posible para obtener respuestas en esta trágica situación”, dijo un portavoz de la institución.
Chicago ha sido uno de los objetivos del operativo “Estrella Solitaria” del gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, con el que ha enviado solicitantes de asilo liberados en la frontera sur hacia ciudades gobernadas por demócratas que han sido declaradas santuarios de migrantes.
Desde agosto de 2022, Texas ha enviado en autobús a Chicago a 4 mil 600 migrantes, según datos divulgados por Abbott la semana pasada.
A las medidas de Abbott se unió el año pasado el gobernador de Florida, el también republicano Ron DeSantis, quien ha destinado fondos de su gobierno para enviar en avión a migrantes desde Texas a estados como Massachusetts y California.
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El pasado primero de julio, un autobús que transportaba migrantes de una ciudad fronteriza de Texas llegó al centro de Los Ángeles.
El autobús llegó alrededor de las 12:40 pm, y los 41 solicitantes de asilo a bordo fueron recibidos por un colectivo de grupos de fe y de derechos de los migrantes. 11 niños estaban en el autobús, según una declaración de la Coalición para los Derechos de los Inmigrantes Humanos.
La oficina de la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, no fue notificada formalmente, pero se enteró del autobús enviado de Brownsville, Texas, a Los Ángeles. El portavoz de Bass, Zach Seidl, de Union Station, dijo en un comunicado.
Con información de AP.