Reuters- Un militar murió ahogado y otros cinco están desaparecidos el domingo luego de ser arrastrados por el caudal de un río en el interior de Perú mientras buscaban eludir un choque con manifestantes, dijeron las Fuerzas Armadas.
Los militares formaban parte de una patrulla que acudía a la localidad de Juli, en la región de Puno, donde el sábado se registraron intensas protestas y desmanes que dejaron al menos 18 heridos e incluyeron un ataque incendiario a la comisaría local.
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El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas dijo en un comunicado que en el incidente del domingo también resultaron afectados otros cinco militares por hipotermia, quienes se encuentran hospitalizados en condición estable.
La patrulla intentó cruzar el río Ilave para evitar enfrentarse a manifestantes violentos que les bloquearon el paso hacia la localidad y les atacaron con piedras y otros objetos, dijeron las fuerzas militares.
“Debido a las dificultades, al caudal del río y al ataque con piedras y otros objetos contundentes, seis miembros de la patrulla fueron arrastrados por la corriente”, detalló el Comando Conjunto.
La región de Puno, fronteriza con Bolivia, ha sido una de las más convulsionadas por las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte y bloqueos de vías que estallaron en diciembre luego de la destitución del expresidente Pedro Castillo, quien trató ilegalmente de disolver el Congreso.
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Los enfrentamientos con efectivos de seguridad y bloqueos de carreteras han causado la muerte a decenas de personas, en su mayoría civiles, en uno de los periodos de agitación social más graves en Perú en al menos dos décadas.
La región de Puno, en la que se encuentran Juli e Ilave, mantiene los bloqueos de caminos y paros de actividades desde enero pasado en que sus pobladores salieron a las calles a exigir la renuncia de la presidenta Dina Boluarte y una dura represión provocó la muerte de 18 personas en la vecina ciudad de Juliaca.