Algunas de las integrantes de los colectivos que se encuentran dentro de las instalaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en la Ciudad de México sacaron documentos que encontraron en la sede de la Comisión.

Las activistas amenazaron con sacar todos los documentos del inmueble si el personal de la CNDH no acude al lugar a recogerlos.

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Las integrantes de los colectivos informaron que las 5 de la tarde de este martes sacarán todos los documentos y los dejarán en la calle, así que no se harán responsables de lo que les suceda.

Esta mañana, en conferencia de prensa, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que la toma de las instalaciones de la CNDH ya "se tornó en un asunto político".

"Hay una demanda justa pero ya se convirtió en un asunto político", dijo el mandatario desde Palacio Nacional. 

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López Obrador aseguró que hay grupos que le tienen coraje a la titular de la CNDH, Rosario Piedra.

"Hay mucho encono, coraje en contra de Rosario Piedra, en contra de la mamá de Rosario Ibarra (\u2026) el partido más conservador no quería, por consignas en contra de doña Rosario, no quería que Rosario Piedra quedara en la Comisión de Derechos Humanos", dijo el mandatario.

Las activistas, víctimas de violencia y familiares de mujeres asesinadas y desaparecidas que tomaron la CNDH exigieron este lunes la renuncia de Rosario Piedra Ibarra como titular de la Comisión.

El colectivo Ni una menos, que mantiene la toma de la sede, consideró que Piedra Ibarra "debe renunciar porque no ha hecho nada" por defender y apoyar a las víctimas de violencia y abusos de derechos humanos.

La semana pasada, Marcela Alemán, de San Luis Potosí, se amarró a una silla en las oficinas de la CNDH para exigir justicia en el caso de su hija Lya, quien apenas tenía cuatro años cuando trabajadores del Instituto Luis Gonzalo Urbina habrían abusado sexualmente de ella en más de una ocasión, sin que hasta ahora haya justicia para los responsables.

Los días subsecuentes, otras mujeres denunciantes se sumaron con un plantón en dicho inmueble en el centro histórico de la Ciudad de México.

Los colectivos feministas, víctimas y familiares de mujeres asesinadas y desaparecidas, que mantienen tomada la sede de la Comisión, lanzaron un pliego petitorio con siete demandas para la liberación del inmueble.

Entre las demandas están la atención inmediata a mujeres víctimas de violencia de género, acceso a servicios médicos, la implementación de un programa de despensas, otro de oportunidades de empleo con perspectiva de género o que brinde facilidades para el autoempleo, la reasignación del presupuesto para la Alerta de Violencia de Genero, el retiro de la campaña "Cuenta hasta diez" y que el gobierno federal ponga fin a la descalificación del movimiento feminista.