Durante el evento del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en Nayarit, para la supervisión del desarrollo del programa IMSS-Bienestar, un grupo de ciudadanos y trabajadores de la salud exigió justicia ante sus despidos injustificados y exigieron su basificación, tras el anuncio de la contratación de médicos cubanos.
Los integrantes pertenecientes a la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) y otros colectivos interrumpieron las presentaciones del presidente López Obrador, del titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo; así como del secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela.
Los maifestantes aseguraron que “es mentira” que se hayan cubierto las plazas a un 99%.
Mientras las protestas se daban en el evento, el secretario de Salud declaró que había opiniones distintas, pero era porque no hay todavía un acuerdo para su integración.
"Pueden expresar esas ideas en las mesas que he hecho referencia (…) hay opiniones, no es falta de lo habitual en las que todavía no se logra un acuerdo" destacó.
Por su parte, Zoé Robledo enfatizó que se atenderían las demandas de los manifestantes, pero que permitieran continuar con el evento, debido a que era para informar a la población.
El presidente López Obrador enfatizó que no está de acuerdo con los puntos de vista con los manifestantes debido a que hay mucha falta de médicos y es "urgente" atender la situación, ya que su prioridad es mejorar el sistema de salud pública.
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"La democracia tiene que garantizar el derecho a disentir, no podemos hacer algo sin consultar a la gente y lo vamos a hacer, pero yo le comento a ustedes, primero que les van a atender\u2026 es mi palabra\u2026 y lo segundo que quiero que se entienda es que aquí hablan como 800 trabajadores de la salud en Nayarit que estaban trabajando de eventuales desde hace mucho tiempo" argumentó
Por último, les dijo a los manifestantes que no le afectaba en nada esta situación mientras daba su discurso sobre la llegada de médicos cubanos al país.