La presidenta Claudia Sheinbaum negó que siga en “pausa” la relación con Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, como había determinado su antecesor Andrés Manuel López Obrador.
En el anterior sexenio, el diplomático fue un visitante frecuente de Palacio Nacional hasta que criticó la reforma judicial, lo que generó un distanciamiento con el expresidente.
La mandataria recordó que al diplomático le fueron presentados nuevos lineamientos para su relación con los funcionarios de la actual administración.
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“Se están reuniendo a través del Secretario de Relaciones Exteriores, que fue lo que planteamos. Ya tuvieron una reunión, han tenido varias reuniones y la idea es que me decía que, además es una norma establecida, que la relación con cualquier país y en particular con Estados Unidos quien coordina esa relación es el secretario de Relaciones Exteriores”, explicó.
La mandataria detalló que el embajador puede abordar cualquier asunto de interés entre los gobiernos de México y Estados Unidos, pero siempre con la intermediación de la Cancillería.
“Si se quiere hablar con secretario del Trabajo, pues a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, le dice: ‘queremos hablar del trabajo’, sobre el tema del tratado y estos temas, pues con gusto se reúnen ambos países”.
Este martes, Ken Salazar volvió a Palacio Nacional, pero no para ver a Sheinbaum Pardo, sino en el marco del CEO Dialogue (Diálogo con directores generales de empresa), acto con la asistencia de más de 240 personas.
La última vez fue el 15 de julio cuando acompañó a un grupo de legisladores de Estados Unidos que visitaron al expresidente López Obrador.
A finales de agosto, el representante de la Casa Blanca expresó los temores de empresarios de su país respecto de los riesgos de la reforma judicial, declaraciones que no gustaron al ex mandatario y fue cuando determinó poner en “en pausa” sus relaciones.