La familia de la lideresa de comerciantes y activista trans, Diana Sánchez Barrios, pidió al gobierno de la Ciudad de México informar sobre los avances de la investigación del atentado ocurrido el pasado 17 de octubre en la calle Motolinia en inmediaciones del Zócalo.

En un comunicado publicado en redes sociales, la diputada local Silvia Sánchez Barrios, hermana de la víctima, lamentó los "hechos de violencia ocurridos a plena luz del día y en uno de los espacios más transitados del Centro Histórico de nuestra ciudad".

Además, expresó la preocupación de los comerciantes por la violencia registrada, por lo que exigió "acciones contundentes como las ya anunciadas por la Jefatura de Gobierno", y pidió a nombre de la familia llegar a hasta las últimas consecuencias para dar con los responsables del ataque que dejó herida a la activista y a dos familiares más.

La legisladora afirmó que su familia, pese a las recientes agresiones, mantendrá su lucha por la defensa de los derechos del comercio popular y agradeció las medidas de protección que han recibido por parte del gobierno de la Ciudad de México.

El jueves pasado, la Secretaría de Seguridad Ciudadana informó que tres personas habrían sido atacadas en el primer cuadro de la Ciudad, en la calle 5 de Mayo, casi en esquina con Motolinia, y fueron llevadas a distintos hospitales para su atención médica especializada.

Tras el ataque, el sujeto huyó del lugar en una motocicleta que lo esperaba en las inmediaciones, mientras que Sánchez Barrios y sus acompañantes quedaron en el piso. Elementos de la policía capitalina acordonaron el área, mientras que los servicios de emergencia brindaron atención a las víctimas.

Posteriormente se dio a conocer la identidad de una de las víctimas, Diana Sánchez Barrios y dos hombres, uno de los cuales falleció por las heridas ocasionadas durante el ataque.

La jefa de Gobierno de la capital, Clara Brugada, anunció horas después del atentado que se reforzará la seguridad en el Centro Histórico.