El Sindicato del Nacional Monte de Piedad estalló la huelga este jueves por inconformidades en los contratos de los trabajadores y luego cumplirse otra semana de negociaciones fallidas en el juzgado.
De acuerdo con reportes en redes sociales, los integrantes del sindicato cerraron varias sucursales en estados como Yucatán, Quintana Roo, Morelos, Veracruz, Colima y Durango.
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Los trabajadores llevan lonas con consignas como “Pedimos el apoyo del pueblo de México en la lucha por la no liquidación de nuestro contrato colectivo de trabajo” y “Más de 3 mil 500 familias dependen de nuestros contratos”.
En un comunicado, el Nacional Monte de Piedad informó que no llegó a un acuerdo con los trabajadores, dejando una “negociación trunca” y puntualizó que llevan más de tres años sin un incremento salarial por la “intransigencia de su dirigente“.
“El sindicato del Nacional Monte de Piedad ha decidido romper la negociación y estallar la huelga programada para el primer minuto del 15 de febrero del presente año”, señaló en el documento.
Explicaron que a pesar de que se aceptaron repetidas solicitudes de prórroga al emplazamiento de huelga, el representante sindical actuó en agravio de sus representados y por intereses personales.
“Se negó todo este tiempo a llevar la consulta con los trabajadores, ignorando el llamado de las autoridades, incluyendo al presidente de la República, a la mediación”, indicó.
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La institución afirmó que aceptó y firmó un convenio con los trabajadores desde diciembre de 2023, pero indicó que el sindicato no estará dispuesto a mostrarlo dado que “no cederá en su postura”.
“Para Nacional Monte de Piedad ha llegado el momento de actuar, atendiendo nuestra misión fundacional de ayudar a quien lo necesite y el mandato de perpetuidad”, señaló, añadiendo que se comunicaran con sus clientes y asegurando que “sus prendas contarán con absoluto resguardo en todo momento”.
Por su parte, la Secretaría de Trabajo y Previsión Social manifestó mediante un comunicado su voluntad de buscar llegar a un acuerdo entre ambas partes.
“A pesar de los múltiples esfuerzos por seguir avanzando, conflictos ajenos a la mesa y la distancia de las posturas de la institución dificultaron el diálogo y las toma de acuerdos”, indicó la secretaría.