Michoacán.- Los siete agentes de la policía comunal del poblado indígena de La Cantera, del municipio de Tangamandapio, que fueron plagiados el pasado martes por presuntos delincuentes, fueron localizados con huellas de tortura durante la madrugada de este viernes, cerca de la carretera Ecuandureo-Zamora.

En redes sociales, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla aseguró que los siete uniformados de la localidad La Cantera, entre los que había una mujer, fueron localizados "sanos y salvos".

Información preliminar de la Fiscalía General del Estado de Michoacán precisó que los policías comunales fueron abandonados por sus captores en el municipio de Ecuandureo —a 50 kilómetros de Tangamandapio—  ante el fuerte despliegue policial-militar que se registró en la zona.

Los policías comunales estaban atados de las manos y presentaban huellas de violencia, por lo que fueron trasladados a un centro médico regional en ambulancias de diversas corporaciones para su atención.

Por su parte, la Secretaría de Seguridad de Michoacán informó que implementaron un operativo coordinado con personal de la fiscalía estatal, Guardia Civil, Ejército Mexicano y Guardia Nacional para encontrar a los policías identificados como Marco Antonio Reyes Amezcua, Oscar Martínez Cuellar, Luis Fernando Lucas Maravilla, Ricardo Ascencio Bravo, Bryan Hernández Pablo, Israel Maravilla Juan y Patricia Mateo Victoriano.

"Los servidores públicos fueron trasladados a la fiscalía regional y se ha pedido el apoyo de servicios médicos para su atención y revisión médica", informó la fiscalía de Michoacán en redes sociales. Además, afirmaron que seguirán con las investigaciones para esclarecer los hechos ocurridos en la desaparición ocurrida el 20 de agosto.

La fiscalía precisó que los uniformados fueron plagiados la tarde del martes por un grupo de presuntos delincuentes, cuando a bordo de una patrulla y una camioneta particular realizaban un recorrido de vigilancia por brechas de La Cantera, un poblado indígena purépecha que se rige por usos y costumbres.

Los vehículos de los agentes fueron localizados abandonados durante la tarde del miércoles en una zona montañosa, aunque las armas largas y cortas fueron robadas por el grupo delictivo.

El plagio de los policías provocó un bloqueo carretero en La Cantera, donde en protesta indígena incendiaron un autobús de pasajeros y cuatro camiones de carga. 

En esta región de Michoacán operan los grupos delictivos autodenominados como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cárteles Unidos (Los Viagras) y Los Caballeros Templarios.

Estas organizaciones del crimen organizado buscan ingresar a los poblados purépechas para intentar establecer narcolaboratorios y campamentos en zonas boscosas estratégicas.

También, los integrantes de estos grupos delincuenciales se disputan el control de extorsiones a comerciantes, carniceros, tortilleros, madereros y transportistas.

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