Por Jaime Luis Brito / Corresponsal
Cuernavaca.– Los periodistas que cubren la nota roja en Cuautla informaron a través de distintos chats que dejarán de escribir sobre hechos de violencia, dado que no existen las condiciones para seguir trabajando sin el riesgo de ser atacado, amenazado o agredido.
Un grupo de periodistas ofrecieron una conferencia de prensa en la Ofrenda de las Víctimas en el Palacio de Gobierno, en la que condenaron el ataque a Andrés Salas, demandaron a la Fiscalía de Morelos y a la General de la República llevar a cabo las investigaciones pertinentes para esclarecer los hechos que dejaron sin vida a su asistente y lesionaron a su hermano.
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Andrés Salas, el reportero que sobrevivió a un atentado en Cuautla en el que murió su chofer, mientras su hermano resultó herido, aseguró en entrevista: "Venían por mí, no hay la menor duda, por eso, no me puedo quedar, porque es una situación de riesgo para mí y mi familia".
Agregó que está encerrado en su casa mientras quienes le atacaron están en la calle. "Ya no puedo cubrir ni dar a conocer la nota roja porque me arriesgo y arriesgo a mi familia", sostuvo.
Además, dijo que desde noviembre del año pasado estaba en el Mecanismo Federal de Protección a Periodistas luego de una agresión por parte de un Ministerio Público de la Fiscalía Anticorrupción; sin embargo, "el botón de pánico que me dieron no sirvió para nada ayer".
Aseguró que la agresión a su hermano ocurrió a unos metros de una instalación de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional y nadie salió ni hizo nada para impedir el ataque.
Señaló que no había recibido amenazas directas: “Es lo que más me sorprende y por eso no me quiero quedar aquí en Cuautla".
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Cuautla se ha convertido, junto con toda la región oriente de la entidad, en una de las zonas más peligrosas de Morelos.
El 4 de enero pasado fue asesinado el regidor panista cuando se ejercitaba en un gimnasio local. Hace dos semanas, como informó Latinus, comerciantes salieron a plena luz del día y en el zócalo central de Cuautla, a agradecer a un grupo criminal que no les cobren derecho de piso.
Los asesinatos se han multiplicado en la zona que se ha visto envuelta en medio de una pugna entre el crimen organizado.